¿Qué comen las urracas?

Las urracas son aves con una dieta muy variada. Se alimentan tanto de alimentos de origen animal como vegetal, lo que las convierte en omnívoras oportunistas. Entre sus alimentos más comunes se encuentran insectos, arañas, gusanos y otros pequeños invertebrados, que son esenciales en su dieta sobre todo durante la primavera y el verano. También consumen semillas, granos, frutas y bayas, recursos que cobran más importancia en otoño e invierno, cuando los insectos escasean.

Además, pueden comer carroña, huevos o polluelos de otras aves, e incluso pequeños mamíferos y reptiles. En entornos urbanos o rurales, no es raro que consuman sobras de comida humana buscando en contenedores de basura, lo que demuestra su capacidad de adaptación. Esta flexibilidad alimenticia es una de las claves de su éxito en hábitats tan diversos como campos agrícolas, bosques, pueblos o ciudades.

Descubre más aves que comen carroña en este post: "Aves carroñeras: ejemplos y características".

Los polluelos de urraca tienen necesidades muy específicas, ya que su crecimiento rápido exige un gran aporte de proteínas. Por esa razón, durante las primeras etapas de vida los adultos les ofrecen sobre todo presas animales: larvas blandas, pequeños insectos y otros invertebrados fáciles de tragar y digerir.

A medida que los polluelos crecen, los padres empiezan a variar más su dieta. Incorporan insectos de mayor tamaño, como escarabajos o saltamontes, y poco a poco introducen también semillas y pequeños restos vegetales. Este cambio gradual prepara a los jóvenes para la dieta diversa que tendrán en la vida adulta, manteniendo siempre una base animal que asegura su desarrollo.

En la edad adulta, la urraca mantiene su carácter omnívoro. Los insectos y otros invertebrados siguen siendo un componente muy importante de su dieta, especialmente durante la época reproductiva. Sin embargo, los cereales y semillas también son muy frecuentes, sobre todo en áreas agrícolas, donde aprovechan cultivos como avena o cebada.

Durante el invierno, cuando hay menos insectos disponibles, las urracas recurren con mayor frecuencia a frutos silvestres, bayas y restos vegetales. En situaciones puntuales, también consumen carroña o cazan pequeños animales, aunque estos recursos suelen tener un papel secundario frente a los insectos y vegetales.

En ambientes urbanos, como mencionamos antes, muestran gran capacidad de adaptación y pueden alimentarse de restos de comida humana, aunque su dieta natural sigue siendo predominantemente de insectos, semillas y frutos.

Sí, existen diferencias notables entre especies y regiones. Por ejemplo:

• Urraca común europea: combina insectos y cereales en proporciones variables según la estación.
• Urraca australiana: se alimenta de insectos y frutos, pero en entornos suburbanos aprovecha también comida suplementaria ofrecida por personas.

Por otro lado, en América del Sur, algunas especies de urracas tropicales consumen una mayor cantidad de frutos y semillas, además de insectos característicos de selvas.

¿Y según la época del año?

Las estaciones también marcan diferencias importantes. En primavera y verano predominan los invertebrados, mientras que en invierno aumentan las semillas y frutos, dependiendo de las regiones. Esto demuestra que la dieta de las urracas no solo depende de la especie, sino también del lugar y del momento del año en el que se observe.

Hemos visto qué comen las urracas pero, ¿podemos alimentarlas? Si se encuentra una urraca herida o un polluelo caído del nido, lo primero es asegurarse de que realmente necesita ayuda, ya que muchas veces los padres siguen alimentando a los jóvenes en el suelo. Si la intervención es necesaria, lo recomendable es trasladar el ave a un centro de rescate o un veterinario especializado en fauna silvestre.

En casos puntuales en los que haya que dar alimento de manera temporal, lo ideal es ofrecer insectos o larvas (de arañas, grillos, saltamontes), que son lo más parecido a lo que recibiría en la naturaleza. Deben ser presas pequeñas y blandas en el caso de los polluelos, aumentando el tamaño y dureza a medida que crecen. También se pueden complementar con pequeñas cantidades de frutas o semillas (pera, manzana, melocotón), pero nunca sustituir el aporte de proteína animal que resulta vital para su desarrollo. También se aconseja ofrecerles trozos pequeños de carne magra, como pollo o hígado.

No es aconsejable dar alimentos procesados, con sal, grasa o condimentos, ya que pueden ser dañinos para el ave. Tampoco conviene que se habitúe a depender de la alimentación humana. El objetivo siempre debe ser favorecer su recuperación para devolverla al medio natural lo antes posible.

Si deseas leer más artículos parecidos a ¿Qué comen las urracas?, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Dietas equilibradas.