¿Es malo no dejar salir a mi gato?
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Los gatos por naturaleza son animales sumamente independientes, curiosos y amantes de las nuevas aventuras. Muchas personas piensan que los gatos necesitan de ambientes abiertos y libertad para ser felices y mantener su instinto salvaje, pero hay muchos dueños de gatos que no se sienten cómodos o sienten temor a permitirles salir a la calle.
Dejar salir a un gato puede ser beneficioso para su salud física y emocional, pero al mismo tiempo, es importante hacerlo con la mejor de las precauciones y estar al tanto de las posibles implicaciones que esto puede traer.
Si te estás preguntando ¿es malo dejar salir a mi gato? la respuesta está en el sano equilibrio. Continúa leyendo este artículo de ExpertoAnimal donde te enseñaremos como llegar a ese punto en que tu gato se encuentre feliz y tu puedas estar tranquilo.
Beneficios de dejar salir a tu gato
Para los felinos domésticos, hacer una escapada una vez al día, les ofrece estímulos naturales positivos, tanto que a los gatos les puede parecer un auténtico parque de diversiones. Además les ayuda a estar de buen humor: árboles para trepar, ramas con que jugar, ratones e insectos para perseguir y luz de sol para sentir el calor y tomar una siesta reparadora después de la aventura.
Los gatos que se les permite salir pueden tener la libertad de hacer sus necesidades en otros lugares con aspecto y sensación más natural, reduciendo o eliminando así la necesidad de sus dueños de limpiar la caja y de comprar la arena con tanta frecuencia.
Se dice que los gatos domésticos no tienen la extrema necesidad de salir fuera y que un gato de interior no tiene por qué convertirse en una mascota perezosa y obesa como el gato "Garfield", más aún, si lo cuidamos y le damos una buena e interesante vida dentro del calor del hogar.
Sin embargo, no podemos negar que a los gatos les gusta salir y andar libres como el viento sin responder a nadie. Ellos pueden beneficiarse de esa actividad física y de la distracción que conlleva. Si eres pro de que los gatos sean dueños de su propia libertad, que puedan salir y entrar cuando quieran a casa y quieres darle ese beneficio a tu felino, es importante que primero tomes ciertas precauciones que luego lo protegerán cuando se encuentre solo en "el mundo salvaje":
- Asegúrate de llevar a tu felino al veterinario para revise su estado de salud y el calendario de vacunación para gatos.
- Si lo vas a dejar salir es de suma importancia que esterilices o castres a tu felino. Los gatos que andan libremente por el exterior y no han recibido esta atención contribuyen a la cría no deseada de mascotas, de los cuales la gran mayoría, terminan deambulando en las calles abandonados.
- Colócale a tu gato un arnés o collar con una etiqueta de identificación que tenga tus datos de contacto.
- Si has cortado por completo las uñas de tu gato (practica que hacen algunos dueños pero que no es para nada sana para el felino) no deberías dejarle salir fuera de casa, ya que no tendrá la suficiente capacidad para defenderse ante otros animales.
- Colócale un microchip. Muchos gatos salen en busca de aventuras pero se pierden en el intento y luego no encuentran el camino a casa. El microchip permitirá encontrarlo e identificarlo.
Desventajas de dejar salir a tu gato
Todas las decisiones que tomes con respecto a tu mascota tendrán un efecto importante en su vida, ya sea a corto o a largo plazo. Dejarlo salir cuando el quiera podría influir directamente en la esperanza de vida de tu gato.
Los gatos que hacen vida en el exterior tienen una esperanza de vida más corta que los gatos que viven cómodos en la seguridad del hogar porque corren riesgo de contraer enfermedades y de sufrir accidentes como peleas con otros animales, robos, atropellos y altercados con personas no muy afines a los gatos que pueden llegar a herirlos o hasta envenenarlos.
Muchos gatos que viven en la calle pueden ser portadores de enfermedades que luego pueden transmitir a tu mascota. Algunas pueden ser severas o hasta mortales, sin olvidar las que pueden contraer debido a alimentos podridos y agentes en el medio exterior. Entre ellas podemos mencionar:
- Sida felino
- Leucemia feline
- Peritonitis infecciosa feline
- Moquillo felino
- Pulgas y garrapatas
- Lombrices intestinales
- Infecciones por hongos
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Mi gatito tiene seis meses pero no se sube al techo es normal ? xq mi otro gato a los cuatro meses ya lo hacía aunque las primeras veces lo tuve que bajar yo
Primero que todo deseo agradecer enormemente a este blog, me ha ayudado a entender a mi gatito, ya que es la primera vez que convivo con uno y me lo dieron muy chiquito, al punto de recurrir a leche sustituta materna. Vivo en una zona podo urbanizada y prácticamente rural, sin mencionar que aveces lo único que escuchamos son los sonidos de las avez, no digo que es un lugar desavitado ya que tenemos vecinos, pero si es bastante montañoso, la casa tiene zona verde y árboles, cosa que a mi gato le encanta, por la noche no lo dejo afuera porque es el punto donde los gatos de monte pueden aparecer y apesar de estar con valla ese miedo convive en mi. Siempre que sale lo vigilo o trato de estar pendiente de él con frecuencia ya que a él le gusta mucho jugar entre la matas y flores del patio lo dejo para que se relaje. Es algo gracioso ya que lo acostumbro que al anoche a cierra hora ya no lo saco más, no molesta en toda la noche, pero alrededor de las a 7 am esta molestando para que lo deje salir.
Hola a todos, como la vuestra lo mio es una historia muy larga con los gatos, los mios provienen de camadas savaljes de un chalet donde los dan de comer. Tuve a dos hermanitos Milli y Vanilli, eran ideales. Yo vivo en un ático y les puse protección para que no se calleran, aun así es un poco sinvivir. El macho se sube a la azotea (la hemos vallado) y se va por las demás a buscar a otro que también vive en un ático. Ese otro gato ya no está, no le ha pasado nada, está en la casa de abajo. Pero el mio macho le gusta la libertad, ejercitarse, hacer ejercicio y volver a casa a descansar. El caso es que yo tengo un patio de vecinos muy grande que linda con otros patios de la manzana. Se me ocurrió la feliz idea cuando eran cachorros de bajarles para que corrieran, este patio tiene un pollete muy alto y pensé que nunca llegarían, pero llegaron, aquí empezó el calvario, todos los dias me volvían loca para que les bajase, yo mientras leia un libro, ellos corrían y eran felices, hasta que la gatita se calló a un parking de una empresa desde el pollete, no se hizo nada porque no es gran altura, pero ya no la pudimos sacar de allí con vida para casa, pusimos una lona en la entrada de barrotes para que no se escapara, a la mañana siguiente cuando abrió la empresa la gata ya no estaba, habíamos estado un dia entero intentandolo, a las tantas nos acostamos yo la oia maullar desde el dormitorio, cuando abrieran a las 7.00 bajaría corriendo para cogerla, pero todo salió mal, de madrugada se escapó del parking y me la encontré atropellada. Nunca pensé en no volver a bajar al gato al patio, porque se que le encanta la libertad que tiene allí, le gusta estar conmigo allí. Yo sufro cada vez que no lo veo, se que no tiene acceso a la calle pero lo paso mal. Tengo dos cachorritos en acogida, mi gato por ello está incomodo y no quiere estar en casa, le bajaba al patio y cada vez era más díficil cogerle para subirle arriba, porque no quiere estar en casa con el buen tiempo y eso que tiene toda la azotea y las terrazas de las vecinas. Un día que estaba en el patio le dio porque no quería subirse para casa y no me hacia caso, el caso es que yo siempre le llamaba y venia corriendo, en los buenos tiempos, pero el otro día se metió en la terraza de una vecina donde yo no podía meterme y la vecina no estaba, mi marido se cabreó conmigo, se armó una buena y el gato que se había asustado con mi mariodo ni de broma venía ni con comida ni nada, me fui a dormír tarde porque no me hiba a quedar toda la noche en el patio sentada en una silla. Le deje la silla con el almuhadon. A las 6.00 de la mañana lo vi desde la ventana del dormitorio, pues estuve todo el tiempo pendiente, estaba en la silla con el amuhadón. Baje, abrí la puerta y el entró enseguida. Osea que es una odisea, quizá por mi culpa, pero se me rompe el alma oirle maullar queriendo salir afuera, como cualquier ser vivo lo necesita. Así que así esta la cosa, de momento no lo he vuleto a bajar, pero está desesperado, ahora mismo está en la azotea. Esto se que no tiene solución y que es un sacrificio que tengo que afrontar. Muchas gracias por agunatar mi rollo.