Las mejores mantas refrescantes para gatos

Comenzamos el repaso a las mantas refrescantes para gatos con la marca Mora Pets. Ofrece un producto muy sencillo, pero de gran eficacia, ya que mantiene el frío durante unas tres horas, reduciendo la temperatura hasta 10 ºC. Es una cama con seis capas. Arriba y abajo cuenta con una funda exterior gruesa, resistente al agua y a los arañazos y fácil de limpiar. También arriba y abajo añade una película de PVC impermeable. En el interior, dispone de una capa de gel refrigerante y otra de espuma. Es rectangular y plegable.

Sin duda, de entre las mantas refrigerantes para gatos esta destaca por su diseño geométrico y por su funcionalidad, ya que puede usarse para enfriar, pero también para calentar, por lo que es un producto 2 en 1.

La cama es redonda y de nailon y PVC. Lleva un gel refrescante de alta calidad (CMC) que enfría hasta 5 ºC la temperatura de la superficie. Por todo ello, resulta una opción completa y también adecuada si queremos una manta para gatos con un toque diferente a juego con la decoración.

La manta refrescante para gatos y perros de Qoosea consigue reducir la temperatura entre 5 y 7 ºC. Está fabricada con PVC de alta calidad, es resistente al agua, arañazos y desgaste. No requiere refrigeración previa y cuenta con un mantenimiento muy sencillo, puesto que basta con pasarle un paño húmedo para limpiarla.

Por otro lado, destacamos que es plegable y fácil de transportar, de manera que es ideal para viajar o exteriores. Así mismo, puede colocarse en el sofá o incluso en el coche durante el viaje.

En este caso, la manta refrigerante para gatos de Leekalos está fabricada con nailon frío, de manera que proporciona la misma sensación refrescante pero con una texto más agradable para estos animales. Es ligera, plegable y fácil de transportar.

Esta manta, además, sí se puede lavar en lavadora porque su tecnología es diferente. Es cierto que no enfría tanto como las mantas de gel, pero sin duda es una buena opción para hogares que necesiten un extra para sus gatos.

Esta alfombra refrescante de gel es rectangular. Destaca por su alegre estampado y ofrece los bordes reforzados para impedir fugas. La tela exterior es suave y resistente al agua y a los arañazos y se limpia fácilmente, pasándole un paño o una esponja. Mantiene el frescor durante mucho tiempo. Puede plegarse, con lo que ocupa poco espacio a la hora de guardarla. Se puede utilizar por ambas caras.

Esta marca ofrece una alfombra refrigerante rectangular de gel no tóxico. Tiene una estructura dividida en segmentos, lo que ayuda a fijar el gel y evitar que se mueva, favoreciendo así su acción refrescante. Como en casi todas las esterillas de este tipo, el tejido externo, en este caso de PVC, es resistente a los arañazos e impermeable al agua. Además, se limpia muy fácilmente, tan solo pasando un paño. Su particularidad es que recurre a una tecnología de compresión de calor doble para los bordes y el centro de la cama, evitando fugas de gel. Es muy fácil de transportar.

Esta marca ofrece otra de las mantas refrescantes para gatos basadas en gel no tóxico entre las que podemos elegir. Como hemos visto, su funcionamiento es muy sencillo y ayuda a disminuir, gradualmente, la temperatura. Está hecha con varias capas, la externa y, en el interior, una de PVC, otra de gel y la última de espuma. Tanto el gel como la espuma ofrecen confortabilidad para el descanso del gato.

Como es habitual, su tejido exterior es impermeable y resistente y permite plegarla para guardarla o transportarla con más facilidad. Ocupa poco espacio. Para su mantenimiento hay que recordar que no se puede introducir en la lavadora ni conviene exponerla directamente al sol. Aunque no lo hemos dicho hasta ahora, este tipo de camas no solo ayudan a combatir el calor, sino que también pueden servir en determinadas condiciones clínicas. Por ejemplo, si el gato tiene fiebre elevada.

Esta alfombrilla refrescante para gatos es de las que afirman disminuir más la temperatura, en concreto, entre 7-9 ºC. El material exterior es muy resistente, a la vez que suave al tacto. Mide 0,4 mm de grosor. Hay que decir que podríamos poner una toalla o similar sobre ella para que al gato le resultase más agradable, pero hay que tener en cuenta que eso la haría perder efectividad. Podemos valorarlo en función de cada gato y de las condiciones climatológicas.

Por dentro lleva dos capas de PVC, una de gel y otra de esponja de 8 mm. Es fácil de limpiar y plegable. El tamaño quizás es grande para un único gato, pero puede ser necesario para los más grandes, aquellos que descansan completamente estirados o para hogares con más de un felino. Por último, aunque algunas de estas mantas refrescantes para gatos pueden congelarse antes de usar para aumentar su efecto, en esta no se recomienda.

La alfombrilla de esta marca presenta algunas particularidades que la pueden hacer especialmente apta para los gatos. Además de su forma redonda, enfría pero no al punto de congelar, una sensación que puede ser desagradable o, al menos, demasiado intensa para algunos gatos. También cuenta con propiedades antibacterianas y antiácaros, repele el pelo y no acumula mal olor. Te hablamos aquí de los "Ácaros en gatos: síntomas y tratamiento".

Como otras mantas refrescantes que hemos visto hasta ahora, es fácil de limpiar, plegable y está fabricada con capas de tejido resistente para que no le afecten los arañazos, PVC, gel no tóxico y espuma. Mantiene el frescor por 2-3 horas. Si se deja descansar unos 15-20 minutos, vuelve a tener capacidad de enfriar.

Disponible en varios tamaños, la manta refrescante para gatos de Yaott está elaborada con una tela suave y agradable para estos gatos, que aporta frescura y confort al mismo tiempo. Es ligera, transpirable, cómoda y fácil de transportar. Ayuda a aportar un extra de frío, pero es importante resaltar que no enfría tanto como las fabricadas con gel en su interior. Por ello, es ideal para interiores, pero no para exteriores.

A continuación, resolveremos las dudas más habituales relacionadas con el uso de mantas refrigerantes para gatos:

¿Las mantas refrescantes para gatos necesitan enchufe o batería?

No, en general suelen funcionar mediante un gel autorefrescante o materiales que disipan el calor corporal. Por ello, no necesitan electricidad ni baterías ni congelación.

¿Qué pasa si mi gato muerde la manta refrigerante?

Las mantas refrescantes están elaboradas con geles no tóxicos. En caso de morderlas, no debería ocurrir nada, aun así, siempre es recomendable evitar que los gatos ingieran el gel. Si tu gato tiende a destruir sus camas y mantas, opta por una muy resistente o que no esté fabricada con gel.

¿Cuánto tiempo enfrían?

Depende del modelo y del entorno en el que vivas. En general, las mantas refrigerantes para gatos que hemos recomendado suelen aguantar el frío entre 1 y 3 horas aproximadamente. El proceso de inicia de nuevo cuando el gato deja de usarla.

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