Suero para gatos: usos, dosis y receta casera

El suero es una solución líquida compuesta fundamentalmente por agua y electrolitos o sales minerales, y se suele emplear en gatos deshidratados o que necesitan reponer electrolitos perdidos. Entonces, ¿para qué sirve el suero en gatos? Es una solución diseñada para mantener el equilibrio electrolítico e hídrico del organismo de nuestros pequeños felinos, ayudando a estabilizarlos y mejorando su recuperación. Generalmente, cuando el gato tiene deshidratación leve, el suero se administra por vía oral, mientras que en casos más graves el veterinario puede requerir la administración por vía subcutánea o intravenosa. Otros tipos de suero también incluyen glucosa, especialmente útil en gatos más débiles o con bajos niveles de azúcar en la sangre.

Un gato necesita suero cuando presenta síntomas de pérdida de electrolitos o deshidratación, como mucosas y encías secas o pegajosas, aumento del pliegue cutáneo debido a la piel poco elástica, ojos hundidos, falta de apetito y respiración acelerada. Esta deshidratación generalmente es consecuencia de episodios de vómitos o diarrea, fiebre, golpes de calor, pérdida de apetito crónica, tras una cirugía en la que no bebe suficiente agua o insuficiencia renal.

Aquí te contamos todos los síntomas que indican que un gato está deshidratado: "Síntomas de deshidratación en gatos".

El suero en nuestros gatos se puede emplear por vía oral, subcutánea o intravenosa, según las necesidades del gato y su grado de deshidratación. Se pueden encontrar los siguientes tipos de suero:

• Suero oral: administrado por vía oral cuando el pequeño felino presenta deshidratación leve por calor, vómitos o diarrea leve, y el gato bebe por sí mismo, aunque sea menos. Puede tratarse de una solución oral casera o comercial.
• Suero fisiológico (cloruro de sodio al 0,9%): empleado para rehidratar o limpiar heridas, mucosas y ojos.
• Suero de mantenimiento: administrado por vía subcutánea o intravenosa en el centro veterinario para que los gatos hospitalizados mantengan una adecuada hidratación, utilizando fluidos que imitan los líquidos corporales del gato.
• Suero glucosado: especialmente útil en gatos con hipoglucemia o en convalecencia, así como en gatos débiles.
• Suero Ringer Lactato: uno de los más empleados en medicina felina, contiene electrolitos como calcio, potasio, sodio y lactato, y se utiliza para corregir desequilibrios electrolíticos, deshidratación moderada a grave o como apoyo en enfermedades renales o gastrointestinales.

La dosis de suero que se emplea en gatos depende del grado de deshidratación, la vía de administración y el peso del animal. Un gato sano requiere entre 50 y 100 ml de líquidos por kilo de peso diariamente. Por ejemplo, en el caso de administración de suero por vía oral, este se debe ofrecer varias veces al día, ya sea directamente en su bebedero o mediante una jeringa sin aguja. En cambio, si el suero se administra por vía subcutánea o intravenosa, la dosis debe calcularla el veterinario, quien evalúa el grado de deshidratación y la condición clínica del animal para administrar la cantidad adecuada y restaurar la hidratación sin sobrehidratar, ya que un exceso de líquidos puede provocar sobrecarga cardíaca o edema pulmonar.

Si tu pequeño felino ha estado bebiendo un poco menos, presenta leves vómitos o diarrea, o pasa mucho calor, puedes preparar un suero casero que ayude a reponer los líquidos o electrolitos que haya perdido. Sin embargo, debes saber que esto no sustituye el tratamiento veterinario y solo sirve como apoyo.

Receta de suero casero para gatos

La receta de suero casero para gatos incluye los siguientes ingredientes:

• 1 litro de agua
• 1 cucharadita de sal
• Media cucharadita de bicarbonato de sodio
• 2 cucharadas de azúcar

Para elaborarlo, deberás seguir estos pasos:

1. Calienta el agua y retírala del fuego cuando hierva.
2. Añade la sal, el bicarbonato y el azúcar.
3. Mezcla bien hasta que los ingredientes se disuelvan por completo.
4. Deja enfriar el suero casero.

Se debe conservar en la nevera un máximo de 24 horas y ofrecerlo atemperado, ya sea en su bebedero o mediante jeringa.

El suero humano que se puede emplear en gatos es el suero fisiológico o cloruro de sodio al 0,9%, pudiéndose utilizar para la hidratación o para limpiar ojos, heridas y mucosas. Sin embargo, no se recomienda usar suero oral humano, ya que sus concentraciones no están adaptadas a la especie felina y podrían provocar alteraciones digestivas, totalmente contraindicadas.

El suero en gatos es, siempre que se emplee de forma correcta y bajo control veterinario, una herramienta útil y segura para reponer la hidratación de nuestros felinos, así como los electrolitos y para apoyar al organismo en momentos de enfermedad. El principal efecto secundario del tratamiento con suero en gatos ocurre en felinos con problemas renales o cardiacos, en los que un exceso de líquido puede provocar sobrecarga circulatoria, dificultad respiratoria y edemas. Además, el suero administrado por vía subcutánea puede causar dolor, abscesos locales o inflamación si no se aplica adecuadamente

Ya hemos comentado los efectos secundarios que puede provocar un tratamiento inadecuado con sueros en gatos. Está contraindicado o debe aplicarse con mucho cuidado en gatos con insuficiencia cardíaca congestiva, ya que un exceso de líquidos puede causar edemas pulmonares o dificultad para respirar. Del mismo modo, está contraindicado en gatos con enfermedad renal avanzada, pues una mala elección del suero o del volumen administrado puede empeorar su función renal. También debe administrarse con precaución en gatos con problemas graves de hígado.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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